En un proyecto de eficiencia energética, IPMVP permite calcular con precisión los resultados obtenidos. Al cuantificar los beneficios generados utilizando un método certificado, este protocolo internacional promueve acciones de mejora del rendimiento energético para los inversores y reduce el riesgo asociado con estas acciones. En el sector inmobiliario y licitaciones públicas, es un potente vector de incentivo. Pero concretamente, ¿qué es el protocolo IPMVP? Y, ¿por qué el uso de un Sistema de Optimización y Gestión de Energía (EMOS) puede facilitar su aplicación en proyectos de optimización energética? Explicaciones.
Índice
- ¿Qué es el IPMVP?
- Protocolo IPMVP: conceptos alineados con el uso de un EMOS
- Usar un EMOS con el protocolo IPMVP: beneficios operativos
¿Qué es el IPMVP?
Acrónimo de Protocolo Internacional de Medición y Verificación del Rendimiento, IPMVP es un protocolo de uso gratuito respaldado y mantenido por la ONG EVO (Efficiency Valuation Organisation). Su objetivo es medir, monitorizar y promover el ahorro de energía realizado como parte de las medidas de mejora (rehabilitación de edificios, optimización de procesos industriales, etc.).
Su creación se inició en 1994, en Estados Unidos, para dotar a las empresas de servicios energéticos de una herramienta que les permitiera informar sobre la eficacia de las acciones realizadas con sus clientes. El método de evaluación, extendido internacionalmente en 1996, ha madurado desde 2007 y se ha traducido a la mayoría de los idiomas.
La última versión del IPMVP, actualizada periódicamente, es de 2022. Su aplicación no es obligatoria, pero suele imponerse a los proveedores de servicios. La conformidad está certificado por un sistema de referencia IPMVP con la certificación PMVA (Analista de Medición y Verificación de Rendimiento) otorgado por EVO.
Nota: en un contexto de transición energética global, el IPMVP ofrece un enfoque consistente para calcular y comprobar la reducción de emisiones de carbono de las organizaciones en todos los países.
Protocolo IPMVP: conceptos alineados con el uso de un EMOS
El estándar IPMVP se basa en 6 conceptos clave, cuya aplicación se facilita enormemente mediante el uso de un Sistema de Gestión y Optimización de Energía.
Precisión
La medición y verificación (M&V) deben ser precisas para reducir los riesgos asociados con los proyectos de optimización y garantizar el control. Un EMOS permite aplicar los modelos de cálculo estadístico necesarios para evaluar las mejores optimizaciones y cuantificar los errores.
Completitud
Se trata de ser exhaustivo y considerar todos los temas que afectan al proyecto de ahorro de energía. Al conectarse a todos los sistemas de datos disponibles, un EMOS proporciona una visión global y más amplia del tema que tratar para disponer de toda la información útil.
Coherencia
Un EMOS evita el riesgo de error humano, objetiva el método de optimización y hace que la recopilación de datos sea coherente hasta el cálculo del ahorro energético realizado y valorado.
Relevancia
La estimación del ahorro realizado requiere el uso de datos actualizados y relevantes. Sin embargo, un EMOS hace posible identificar e implementar los Indicadores de Rendimiento Energético (EnPI) relevantes. Si tomamos el ejemplo de METRON, la relevancia también está garantizada en el cliente mediante un seguimiento de la implementación realizado por los gestores del proyecto.
Transparencia
El protocolo IPMVP requiere la implementación de informes (medidas y controles – M&V, informe de recopilación de datos), con explicaciones sobre cómo se calculan los ahorros. Las funcionalidades de creación de informes dentro de un EMOS (paneles de control, informes periódicos, etc.) van precisamente en esta dirección.
Prudencia
Este principio, consistente en no sobrestimar la evaluación del ahorro de energía, requiere poder probar varios escenarios para elegir el más prudente. El EMOS permite precisamente este análisis multiescenario.
IPMVP y normas ISO
Las directrices del IPMVP y las normas ISO se complementan perfectamente (especialmente ISO 50001) y usan un vocabulario común (M&V – Medición, verificaciones e Indicadores de rendimiento energético – ENPI). Por lo tanto, el protocolo se puede utilizar como una herramienta operativa si está trabajando en proyectos de cumplimiento de las normas ISO.
Usar un EMOS con el protocolo IPMVP: beneficios operativos
Con un EMOS, se facilita la aplicación de la metodología IPMVP en todas las etapas de un proyecto de rendimiento.
Comprender la metodología IPMVP
Con IPMVP es posible medir y valorar la ausencia de consumo de energía lograda a gracias a los trabajos de rendimiento energético. En la metodología del protocolo, los datos de consumo se comparan en dos periodos:
- un período de referencia durante el cual se recopilan datos de consumo con fines comparativos,
- un período de información: tras la ejecución de obras, o actuaciones de mejora del rendimiento energético, se mide y analiza el consumo energético para deducir el ahorro realizado.
Beneficios obtenidos según las etapas del proyecto
Según el protocolo IPMVP, el desarrollo de un proyecto de mejora energética se divide en 3 etapas fundamentales: planificación, ejecución y mantenimiento del rendimiento. Las diferentes funcionalidades de un EMOS facilitan la gestión de proyectos en cada una de estas etapas clave.
Planificación del proyecto
Durante esta fase inicial, EMOS permite almacenar y procesar grandes cantidades de datos. Esta información se utilizará para:
- crear una línea de base que sirva como fórmula para calcular el consumo de energía de un edificio o de un proceso en función de diferentes parámetros (temperatura, presión, volumen de producción, etc.). Esta línea de base se utiliza para comparar el nivel de consumo de energía antes y después de la implementación de las optimizaciones, en función de los diferentes criterios que se tengan en cuenta.
- evaluar diferentes escenarios de optimización e identificar las medidas de eficiencia energética que implementar para obtener los mejores resultados.
Implementación de las medidas y verificaciones operativas
Antes de medir los efectos de un proyecto de optimización energética, debe asegurarse que se haya implementado correctamente. En esta etapa, el EMOS proporciona todos los parámetros útiles para verificar el correcto funcionamiento del sistema bajo control. Los paneles de control de EnPI permiten asegurar que el proyecto de optimización energética produzca los resultados esperados.
Mantenimiento del rendimiento en el tiempo
Según el IPMVP, el seguimiento del rendimiento se realiza en 3 etapas: recuperación de datos, cuantificación del ahorro realizado y elaboración del informe.
El seguimiento del rendimiento energético es una de las funciones fundamentales de un EMOS. Permite asegurar la gestión de los datos, el suministro de panales de control para informes de gestión de energía (semanal o mensual), o el envío de alertas en caso de desviaciones de consumo.
Para calcular el ahorro generado como parte de un proyecto de mejora del rendimiento energético, se utiliza cada vez más el protocolo IPMVP. Complementario a los estándares ISO, ofrece un enfoque consistente, a escala mundial, para medir y verificar la reducción en el consumo de energía y las emisiones de carbono logradas por las empresas. Al proporcionar todas las herramientas necesarias para la aplicación del protocolo IPMVP, un sistema de gestión y optimización de energía es, por lo tanto, la elección correcta para planificar, implementar y monitorizar un proyecto de eficiencia energética en pleno cumplimiento y con la máxima eficacia.